A modo de preámbulo

Hace apenas seis décadas que los tranvías dejaron de ser el principal medio de transporte público con que contaba La Habana. Entonces unas treinta líneas eran servidas por cientos de carros eléctricos que recorrían diariamente miles de millas por toda la ciudad, enlazando áreas residenciales con parques industriales, hoteles con centros nocturnos, mercados y centros comerciales con escuelas y repartos. La vida iba a la par del tranvía. Paraderos, plantas eléctricas, estaciones y oficinas, eran elementos de un paisaje urbano desgraciadamente llamado a desaparecer...

Todo esto fue el tranvía. Raíles que horadaron calles y avenidas que llegan, inutilizados, a nuestros días, cables aéreos entretejidos en tupida red de cobre y bronce, ruidos y silencios sumergidos en la historia de los barrios y sus habitantes, huella arquitectónica, histórica y cultural reflejo de los ritmos trepidantes de la modernidad...

En esencia, un aval más que suficiente para ser recordados por todo lo que hizo por nuestra ciudad...

viernes, 6 de enero de 2012

Imágenes del tranvía eléctrico (9)

Un carro eléctrico circulando por la calle Zulueta, -conocido corredor tranviario citadino-, justo cuando pasaba por el pórtico trasero del famoso y  desaparecido Hotel Pasaje, actualmente sala Polivalente Kid Chocolate (deportes), contiguo al Cine Payret y frente al Capitolio de La Habana. El hotel, cuya entrada principal daba al Paseo del Prado, fue construido por la familia habanera Zequeira y Zequeira en la segunda mitad del siglo XIX. Su nombre, Pasaje, se debía a que ambas entradas estaban conectadas por un "pasaje" que distribuía los espacios al interior de la edificación; junto a las funciones de alojamiento coexistían también otros usos comerciales y de servicios tales como tiendas y almacenes.En la fotografía aparece un vagón de plataformas abiertas, probablemente de color rojo, de ocho ventanillos, tal como corresponde al modelo "antiguo" de carros eléctricos habaneros. Fue muy común en La Habana el que los hoteles estuvieran cercanos a las líneas de tranvías (o viceversa), y si bien en este caso el tranvía pasaba justo por la entrada del hotel, también el servicio de transportación pública se extendía a los hoteles Inglaterra, Telégrafo, Plaza y Sevilla, por señalar entre los más importantes localizados en el entorno. Un último ejemplo, aunque lejos del Pasaje. El famoso Trotcha, que estuvo ubicado en Calzada y 2, fue el hotel de lujo del Vedado y al cual, durante las primeras décadas del  siglo XX, solamente se llegaba en tranvía desde la calle Línea.

1 comentario:

  1. A pesar de que los tranvias, hace tiempo, desaparecieran de su hermosa ciudad, es una suerte que estos edificios, si hayan podido sobrevivir. Ahora o quizas en unos años, con sus actuales funciones u otras futuras, son elementos que dan caracter a una ciudad y evitando la uniformidad que en muchas de ciudades actuales causan la masividad de nuevos edificios.
    Tan solo falta que en un futuro no muy lejano, vuelvan a circular por ellas los eléctricos, ya sea como un moderno sistema de transporte, o como un servicio turístico.
    Un abrazo de tus amigos desde Barcelona
    railsiferradures

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